La
filosofía de Nietzsche plantea una continua crítica al camino que
el hombre occidental ha recorrido. No se limita a la crítica sino
que pretende que se inviertan los valores occidentales, fruto de una
primera transvaloración iniciada por Sócrates, considerado el gran
corruptor. La crítica a la filosofía anterior se realiza de forma
genealógica para detectar el origen, condiciones y circunstancias en
las que se produjo esta inversión de los valores.
En
primer lugar hay que destacar la crítica que hace a la metafísica
tradicional, la cual ha instaurado un dualismo ontológico al
distinguir entre mundo inteligible, el real captado por la razón, y
mundo sensible, captado por los sentidos. Este dualismo, iniciado por
Platón, pone por encima lo que el considera incorrecto y en cambio
niega la realidad, que el mundo es devenir.
Para
Nietzsche la filosofía tradicional está basada en el miedo y el
odio al devenir, que trae la vejez, la muerte...el ser humano inventa
la ficción de la metafísica para escapar de la caducidad y dar a
su existencia un significado infinito. Realmente no existe un mundo
verdadero y otro aparente sino el devenir constante del ser. Debemos
negar, afirma Nietzsche, absolutamente toda ontología que implique
un desprecio por la vida tal y como ella es, vital y cambiante. Esta
crítica a la metafísica queda recogida en sus cuatro tesis.
La
crítica a la metafísica estática, la cual ha producido una falsa
interpretación del ser al despojarlo del cambio y el devenir, se
completa con la crítica al conocimiento conceptual y al lenguaje.
Para
Nietzsche las categorías o conceptos de la razón suponen el mayor
obstáculo a la hora de interpretar la realidad como devenir. Ello se
debe a que con los conceptos intentamos expresar y significar una
multiplicidad de cosas que nunca son idénticas. Estos conceptos se
fijan a través del lenguaje, el cual también está relacionado con
la metafísica estática.
La
estructura gramatical de una lengua establece el campo de
interpretación y las posibilidades de conceptualización del mundo.
De manera que la estructura gramatical “sujeto” y “predicado”
se presta a la construcción conceptual ya que da por supuesto que
existe un sujeto del que se afirman determinadas cualidades, aunque
el sujeto sea una construcción nuestra.
Para
evitar la petrificación del devenir por el lenguaje, Nietzsche
defiende un uso metafórico de este. La metáfora es una verdadera
perspectiva porque con ella se logra una integración de diversidades
mediante el juego de las posibles interpretaciones.
Por
otro lado, Nietzsche hace también una crítica a la moral
tradicional, a la que considera “contra naturaleza” ya que ha
invertido el modo natural de valorar del hombre, voluntad de poder
enferma. Nietzsche considera que esta moral tiene sus raíces en el
platonismo y se continúa gracias al cristianismo. El mundo de las
Ideas platónico acabó por convertirse en el reino de los cielos.
Nietzsche diferencia entre moral de señores y moral de esclavos. La
moral de señores está guiada por “fuerzas activas” que surgen
espontáneamente del sujeto y tienden a su crecimiento. La moral de
esclavos está guiada por “fuerzas reactivas” que surgen de la
debilidad, el miedo hacia la vida y la envidia respecto al fuerte.
Como consecuencia surge una moral enferma que niega la vida, es
voluntad de nada “nihilismo”. Este término posee doble
significado, activo y pasivo. El pasivo consiste en la aceptación
pesimista de la ausencia de valores y la falta de objeto de la
existencia, es un signo de decadencia. El activo busca destruir todo
aquello en lo que antes se creía como camino hacia la transformación
de valores. Es un signo de creciente poder de espíritu. Los valores
son destruidos por la voluntad de poder.
Desde
la ilustración la creencia en Dios había estado en crisis.
Nietzsche anuncia las consecuencias que la muerte de Dios tendrá
para el ser humano. Si Dios es garantía de orden moral, político y
legal, de la verdad, del conocimiento..su muerte tendrá que tener
repercusiones en todos los ámbitos de la vida. La muerte de Dios no
significa que ya no se crea en Dios, es que todo lo que se ha
sustentado en él paulatinamente se desmoronará. Cuando las
consecuencias de la muerte de Dios lleguen aparecerá el nihilismo.
El
nihilismo sigue siendo expresión de la decadencia, pero en este caso
es expresión de la decepción que sienten aquellos que aceptaron la
moral cristiana y la ven ahora desmoronarse. En esas circunstancias,
el nihilista deja de creer en cualquier cosa, dedica su vida a la
crítica sistemática de cualquier verdad negando todo sentido a la
vida al no existir ya morales ni verdades absolutas.
Sin
embargo, eliminando los falsos valores queda abierta otra
posibilidad, la de crear nuevos valores pero desde unos instintos que
amen la vida. Para hacer esto será necesario un superhombre, el cual
tiene como función recobrar el sentido de la vida. El superhombre es
el héroe del futuro, un filósofo por venir que comprenderá la
esencia de la vida y a través de él podrá manifestarse. La manera
de conseguir esto es a través de la voluntad, que no es más que la
expresión de los instintos que constituyen al ser humano. Este acto
de voluntad es un acto de valoración, de creación de nuevos
valores. Este superhombre que se rige con una moral de señores y no
de esclavos asume con alegría y sin resentimiento el eterno
retorno. Esto significa la perenne repetición del tiempo, el retorno
de lo mismo tanto lo bueno como lo malo.
Nietzsche
no se considera el superhombre sino su anunciador. Su tarea es
preparar al mundo para su venida y lo hace destruyendo los valores
existentes en su cultura, que no son más que fruto de la decadencia.
El
superhombre que dice sí a la vida y a los valores propios de esta
deberá sufrir una triple metamorfosis de su espíritu del siguiente
modo:
- Camello. Animal sumiso. Representa al que se conforma con obedecer ciegamente.
- León. El gran nihilista, símbolo de la negación de todos los valores tradicionales.
- Niño. Simboliza vivir libre de prejuicios, la libertad absoluta, el superhombre.
Los
viejos valores racionales son sustituidos por otros vitales y
sensibles.
No hay comentarios:
Publicar un comentario